Fundaciones de las ciudades Coloniales en Chile durante los siglos XVII y XVIII. Extrapolación de la fundación de Limache
Fundaciones de las ciudades Coloniales en Chile durante los siglos XVII y XVIII. Extrapolación de la fundación de Limache.
Hecho
por Andrés Fernández, revisado por Samuel Gaete y evaluado por el profesor Antonio
Rodríguez del ramo de Historia de Chile Colonial: Identidad e institución Indiana, de la carrera de pedagogía de historia de la facultad de Humanidades de la universidad de Playa Ancha, Valparaíso, 2017.
Introducción
Antes
de mencionar la política fundacional del siglo XVII y XVIII hay que dar un
contexto general de lo que sucedió en el periodo de la conquista y los primeros
años del periodo colonial en el reino de chile, ya que conociendo su pasado se
puede entender porque fue necesario esta renovada acción del gobierno en fundar villas y pueblos para
la gente, que producto a los antecedentes que mencionaremos estaban muy
dispersadas en los campos, a lo que hoy llamamos ruralización, así que la
acción que toman los gobernadores Amat, Manso y O’Higgins entre los más
principales autoridades que estaban a cargo de la fundación de villas. Además
debemos considerar la acción de los párrocos como el jesuita Villareal muy importante para este proyecto nacional,
además mucha hacendados que costearon los obras de su villa para que este no cállese en la degradación y
el abandono del pueblo.
Contexto.
Durante
los siglos de descubrimiento y conquista, existió uno de los momentos con
relación al origen y desarrollo de las divisiones distritales de la Gobernación
de chile; Las ciudades iniciales de poblamiento, por el conquistador-fundador
que las dotaba de jurisdicción y de términos en el nombre del Rey. Ya en el
siglo XVI se han implantaron 15 nuevas ciudades, en donde se realizaron
repartimientos a los vecinos y abastecimiento de la población, aunque esta era
escasa y concentrada, además con los ajustes en el radio jurisdiccional (Cobos,
1989, pp18-19).
Desde
el primer levantamiento general indígena en que le coso la vida al gobernador Pedro
de Valdivia en Tucapel en 1553 deja al aire muy sensible para las demás
autoridades españolas, los indígenas cada vez se adaptaban más a la guerra
contra los españoles, hasta los mismos cronistas decían que los españoles vestían
de indios y los indios de españoles. Por
la pobreza, la poca ayuda recibida por las autoridades de castilla y más
de 4 décadas después aproximadamente, muere el gobernador Oñez de Loyola a causa
de otro levantamiento general indígena en Curalaba en 1598 , pero este
levantamiento no solo se cobró la vida
del español a cargo sino que arraso a todas las ciudades del sur del Biobío
dejando solo las ciudades al norte de este rio que sirvió como delimitación por
más de 3 siglos, hasta que en el periodo de la república chilena se toma esos territorios
en propiedad del estado de chile.
En
los principios del siglo XVI se vivía una pobreza general, los mismos
autoridades mencionaban al rey que chile vive en la miseria total siendo el
país más rico del sur, las ciudades no daban lo suficiente, los indios estaban
en cantidades reducidas, por las enfermedades y sobreexplotación, pero en el
siglo XVII no hubo ningún interés de fundar villas y ciudades, principalmente
fue por la falta de recursos y de motivación por las autoridades del reino de
chile y de los mismos de castilla. Aunque ya para fines del siglo XVI, se
empieza implementar la nueva
administración de la división territorial, remplazando al conquistador-
fundador, los partidos (o corregimientos) completamente rurales, en donde
comenzara a instituirse, y aparejaba más los recortes jurisdiccionales (Cobos,
1989, pp. 22).
Latifundio.
 |
| Campesinos |
Intento
de fundación
Afines del siglo XVII el gobernador Marín de
Poveda va innovar con el primer intento de fundación de una ciudad la cual sería
la ciudad de Talca, pero no había recursos en las arcas de Santiago,
literalmente con suerte se sustentaban con lo poco que ganaban en la
exportación al virreinato del Perú. A su vez nacían críticas de parte de los
párrocos acerca de la ubicación rural del pueblo de Chile como el cura Diocesano
que hablo sobre la dispersión del pueblo y sus consecuencias, y su homólogo de
este el cura De la Puebla que dice que traerá malas costumbres y ociosidad a la
gente (Lorenzo, 2013, pp. 17).
A
la fundación de ciudades y villas.
Entonces
hasta en XVII no hubo motivaciones para cambiar solo por la excepción ya
mencionada con anterioridad, pero a principios del siglo XVIII surge un cambio
radical a este pensamiento del siglo pasado, con la fundación de Quillota que
daría el modelo a seguir a las demás fundaciones de villa y ciudades dentro del
siglo XVIII. Quillota siendo la primera villa fundada por el gobernador Santiago
Concha y Salvatierra y el porte del hacendado Alonso de Pizarro, quien dono 3 y
media cuadras para la construcción de su villa, la otra parte la tuvo que
costear los vecinos, siendo la única vez donde los vecinos tienen que costear
el territorio en el cual se quieren asentarse, pero Quillota fue dejada al
margen por mucho tiempo hasta 1723 por la rebelión mapuche, el cual se firmó un
tratado de Tapihue.
Para
la fundación de las villas y lograr avanzar contra la ruralización la junta de
poblaciones crea las pautas el 12 mayo 1745 donde establece privilegios que
disfrutaban los pobladores, pero surgía un problema dentro de la población la
cual se debía avecindarse en las nuevas villas, lo cual es la lejanía que estaban
estas villas de las haciendas que trabajaban lo cual las autoridades lo
obligaban a vivir allí, hasta viendo la situación en 1751 se hace voluntario el
avecindarse (Lorenzo, 2013, pp. 23). Y puedes elegir donde se desea establecer la villa por consenso de
mayoría, pero sus habitantes deben dar cuenta de sus bienes para crear sus
casas (Lorenzo, 2013, pp. 24).
Ya
hacia 1670 se constituyeron varios partidos (estos eran divisiones
territoriales administrativas dentro de una provincia usadas en la colonia),
pero estos tenían “autos de fundación”. En la provincia de Santiago eran nueve partidos,
que eran Copiapó, Coquimbo, Cuyo, Aconcagua, Quillota, Santiago, Melipilla,
Colchagua y Maule, más con Valparaíso y Rancagua, mientras que la provincia de
Concepción eran Chillán, Itata, Rene, Puchacay y Concepción. Sin embargo
Valdivia y Chiloé que tenían rango de gobierno subordinado (Cobos, 1989, pp. 22).
 |
| Cabildo. |
Características para una fundación.
El
lugar a la elección por el superintendente, la junta o los mismos vecinos
tenían que tener ciertas cualidades para sus fundación, las cuales tenía que
poseer una afluente de agua ya sea un
rio o lago , lo que importase es que fluyese de manera constante el elemento
vital para la subsistencia de los vecinos y a su vez la de la misma villa;
tenía que ser fértil para poder cultivar para su economía de subsistencia en
sus chacras concedidas por las autoridades vecinales; un lugar donde el ganado
pueda pastar para que puedan reproducirse saludablemente, una zona en donde se
puede tomar madera sin tener que comprarla en otros lados donde salía muy cara
la compra y por ende se regularizaba las
tierras para su correcto funcionamiento (Lorenzo, 2014, pp. 76).
Luego
cambio el modelo de elección de territorio y esto fueron por parte de los vecinos
los cuales estos elegían donde se querían establecer, pero en base de las
cualidades anteriormente mencionadas para la conservación y un correcto
funcionamiento de la joven villa. También tenían que basarse en las
representaciones e instrucciones, ya mencionado que son los instrumentos
jurídicos para la fundación de villas y pueblos, esta le daba cantidad de
tierra a los vecinos, los requisitos que deben tener, los beneficios que
ganaban los vecinos por vivir allí, donde fundar y acerca de las manzanas,
solares y calles. Los solares centrales son para la iglesia, el cabildo y la
cárcel, y viviendas de los vecinos más importantes de la ciudad (Lorenzo, 2014,
pp. 81).
Con
la fundación de las nuevas villas no eran ostentosas ni magnificas sino todo lo
contrario esta fue bastante humilde, pero lo que si se hacían notar era los
pregoneros que difundían la fundación de una nueva villa para estimular la
llegada de habitantes y núcleos urbanos, además con esta difusión la gente
conocería cual serían sus deberes estipulados por la Junta y cuales seria sus
beneficios por habitar allí. Se buscaban que fueran estables duraderos y ser
agentes de civilización del medio rural, se solicitaban que las casa fueran de
adobes y tejas, pero el grueso de la población que vivía en las nuevas villas
era gente extremadamente pobre, lo que único poseía era con lo que estaba
vestido, lo único que podía costear en casas muy rusticas y techos de paja.
Al
principio del poblamiento se carecía de recursos desde ese momento se solicita
beneficiar a la villa con un fondo proveniente de la real hacienda como unidad
de fomento para que la localidad no caiga en la degradación y por consiguiente
en su abandono. La villa faltaba muchas cosas y muchos profesionales como
carpinteros, albañiles y adoberos, lo cual produce que la gran mayoría de las
casas con excepción de los ricos fueran de forma muy rustica y un techo de
paja.
Ya
mucho más adelante en la última parte del siglo XVIII, O’Higgins vuelve implantar
la expropiación de territorios, pero la junta de vecinos tenía derecho de
opinar donde se debía establecer las nuevas villas, la junta población pasa a ser
meramente consultiva, ya no tenía el poder que tenía antes al principio de las
fundaciones de los poblados.
Para
que se fundase una nueva villa había que tomar ciertas consideraciones siendo
la primera que fuesen por lo menos 10 vecinos casado y establecidos con
familias, además de tener una idea de donde se quieren establecer y tomando en
cuenta las obligaciones y derechos que tendrían cada vecino.
Ahora
surge una cuestión bastante interesante tratar e influye de manera importante
en la creación de las villas del reino de chille, como esta se financiaban. En
un principio esta se financio por la real hacienda la cual le daba 12.000 pesos
para la creación de poblados, pero esta cantidad fue muy baja, ya que con esto
era poco o nada se podía construir, pero podemos hablar de un antecedente de
que busco la financiación de las villas.
El
padre Villarroel buscaba crear villas fronterizas en el Biobío para la defensa
del reino, por lo cual busca reducir el ejército de los 600 soldados que habían
para la defensa de este, el cual recibió 100.000 pesos para la mantención del ejército,
con este dinero extra permitiría la fundación de más villas ya que la villas
tendría una doble función la cual sería desruralizar de la población de la
regio y la defensa del reino porque cada villa va a poseer 4 piezas de artillería
y barracas para la defensa, 53 soldados para la defensa del poblado y se
fortificaban 29 manzanas para cualquier correría indígena, en el caso de cualquier
expedición venia del cuerpo de los dragones del reino.
Otra
forma de financiación fue la venta de títulos otorgados por el rey para poder
financiar la construcción de las nuevas poblaciones, como por ejemplo cuando se
vendió los 6 títulos otorgados sacaron más de 80.000 pesos para la junta de la
población la cual iba dirigido para la junta de poblaciones, otro ejemplo fue
la venta de títulos para el pueblo de san Felipe donde ganaron más de 9.000
pesos para sus arcas. Fue un método bastante efectivo a que con las arcas
nacionales parcialmente vacía y la gracia de su majestad para otorgar esos
privilegios fue de la mejor manera para financiar la creación o la evolución de
las nuevas ciudades que iban surgiendo en el siglo XVIII.
Otro
tipo de ayuda económica fue de los mismos pobladores con más capital ya que
tenemos que recordar que las obligaciones dictadas por manso de Velasco y la
junta de vecinos de los vecinos eran todas las obras públicas, las limpiezas de
acequias y el ornato de la ciudad (Lorenzo, 2013, pp. 72). Pero como ya
mencionamos con anterioridad como se lograría si la gran mayoría de los
pobladores eran de una extrema pobreza, esto se solucionaba por la buena fe o
descargo de conciencia de los ricos hacendados que se encargaban de los gastos
más fuertes, de ahí podemos mencionar el caso de Talca en donde la familia cruz
se destacó como los benefactores de las obras publicas más grandes y
fundamentales en los primeros años de dicha ciudad, como ejemplo el primer
hospital, las milicias y actos cívicos. Pero esto no surgía en todas las
poblaciones ya que el ministro de la real hacienda quería que hubiese un rico
generoso como la familia cruz en cada villa que se fundó o se fundasen.
Chile
se encontraba despoblado por el cual la fundación de las villas fue un medio
para atraer y fijar población y detener el proceso de ruralización, es claro
que chile había 500.000 almas y no era la solución traer más gente de España
sino la política de fundar ciudades era la única medicina para solucionar el problema
económico y socio cultural que había en el reino. La forma de atraer gente
era de mostrarle la privilegios que
podía obtener por transformarse en vecino de la nueva aglomeración de gente,
los cuales se da al poblador: un buey, un caballo un par de vacas, ovejas, cinco
fanegas de trigo, tener sagrada sepultura que era para la religión de entonces
una forma de alcanzar el cielo y ya
pasado unos años vender sus bienes.
 |
| Hacendado. |
Privilegios
no menores se obtenían por ser vecino, pero sus obligaciones también fueron bastante
complicadas, sin embargo valió la pena porque permitió la consolidación de las
villas como forma organizativa económica y social que trajo muchos benéficos al
país.
En
el primer caso mencionaremos a las villas y su acción de civilizadora, citando
al fiscal de la audiencia Pérez Uriondo, en 1789 define a la sociedad buena
intrínsecamente, por hacer posible que la población campesina despierte de ese
sueño o concepto errado, que los concedía a vivir dispersos en el retoro y
oscuridad de las campañas negador del suyo como bien de la sociedad (Lorenzo,
2014, pp. 153-155).
La
gente que vivía en el campo que en consecuencia eran la pobreza, delincuencia y
vagabundaje, la villa tuvo como elemento de regeneración a esta gente que son representaciones
de su pobre realidad, le dan domicilio e introducirlos en la vida social como
un buen ciudadano. Además estos se cometía con métodos bastante autoritarios
como quema de los ranchos donde se vivía, disciplina moral, prohibición de los
juegos y buena higiene, siendo que los mismos corregidores vivían en las mismas
villas donde aplicaban justicia.
Como
función religiosa permitió que los pobladores, que el cura pueda establecerse
en las villas, ya que en la zona rural no podía establecerse y poco podían
estar en la palabra de Dios los grupos rurales, la solución anterior a las
villas era que se establecían capillas rurales de la cual fue eliminada y la
única solución fue crear villas fue la solución para acabar con la anemia
espiritual que existía en el reino (Lorenzo, 2014, pp. 103). No cabe duda que los
curas han influenciado en la administración territorial que eran los curatos y
fundación de algunas villas para instalar una capilla, como el obispo
Espiñeira. (Cobos, 1989, pp. 26-30). No es menos decir que en la limitación del
entre el obispado y de la intendencia (Santiago o Concepción) no existía una
congruencia (Cobos, 1989, pp. 38).
Para
la formación militar es inherente la fundación de villas ya que sirvió como
defensa para la defensa de indios y delincuentes, el caso más importante son
las villas del Biobío se instalan para el resguardo y seguridad de este reino,
aduciéndose que, gracias a ella, la capitanía general ganara en población y
defensa (Lorenzo, 2014, pp. 104).
En
lo económico fue fundamental, ya que constituían en instrumento de
transformación de la actividad económica en el campo, por medio de chacras que
eran otorgadas para la producción de elemento que pueda resurgir la economía de
la villa, y por consiguiente del reino. La función máxima de la fundación de
villas es la utilización de todas estas gentes flotantes a que produjesen para
estabilizar y el aumento de la economía del territorio, podemos conocer esta
función como la más importante entre todas las demás.
 |
| Fundación de los Ángeles |
A
modo de concluir con la temática.
Desde la fundación de
Santiago hasta el desastre de Curalaba y la formación de la zona de frontera,
Chile aún vivía en pobreza y financiar la creación de una ciudad o una villa
era costosa, más aun para la Real Hacienda. Durante el siglo XVII, la situación
era deplorable, no había financiamiento, ni motivaciones para fundar una ciudad,
exceptuando Talca, con que además la población estaba dispersa por la
ruralización que estaba entonces. Está claro que al momento de fundar se es
necesario no solo contar con financiación, sino también contar con recursos
naturales (agua, tierra fértil y bosque) para la producción económica y
sustentable de la villa y además de contar con instituciones para ofrecer
derechos y deberes a los pobladores. Pero para el siglo XVIII, se dieron las
oportunidades demográficas, políticas y sociales para la fundación de Villas,
como la crecida población de los latifundios, las oportunidades y beneficios a
las personas que ayuden a poblar una villa, expropiaciones por algunos
gobernadores, financiamiento de algunos ricos y venta de títulos, los auto de
fundación, motivación de la gente, establecimiento religioso, entre otras. Sin
embargo al formarse de estas villas, estas tenían un carácter pobre y humilde,
aunque en el sur tenían un carácter defensa en la frontera. Con todo ello, la
conformación de las ciudades en el reino de Chile, durante la conquista y
colonia, se ha visto en vuelta por diversas problemáticas o impedimentos para
su conformación, de índole económico, político, social y conflictivo.
La Entrada
a Limache
Introducción
Chile
fue un país donde las fundaciones de ciudades se estancó en el siglo XVI con la
caída del sur en manos de los araucanos con el levantamiento general de
Curalaba, recién replanteándose construir una nueva forma de agrupamiento
poblacional para sacar a la población rural, con el objetivo de urbanizarla, como
así fueron las villas, el cual fue muy complicado por el alto índice de pobreza
de sus habitantes y las carencias que tuvieron, así que los hacendados ricos
costeaban las obras más importantes y de esta forma surgieron las villas como
centro de población rural.
Pero
no significa que no haya habido otras formas de agrupar población, como los
latifundios, fuertes y las comarcas, la cual nos centraremos en esta ya que la
ciudad que nos centraremos es de este tipo.
 |
| (Libro en que se baso este ensayo) |
Antecedentes.
Para
tener un antecedente de las llegadas de los españoles en Limache, ciudad que
tomaremos para la investigación, esta estuvo habitada por dos tribus indígenas
los Picunche, que tuvieron un encuentro con los españoles, y la cultura
Aconcagua, ya desaparecida antes de 1450; aislados en caseríos y en rusticas
rucas y creación de cerámicas emparentadas con la cerámica de las culturas
norte.
Además
cabe mencionar que los incas tenían presencia en la zona, implantado el sistema
de la mita a través de los indígenas doblegados y obligaron extraer oro de los
ríos marga marga, por esos se puede afirmar que Limache significa gente de Lima
dada por la presencia indígenas predominante incas en la zona central.
Ya
en relación a los españoles, el primer señor y dueño de Limache fue pedro de
Valdivia pero a la vez se mencionaba que era en Quillota hasta que en 1989 se
demostró que su casa fuerte estaba ubicada en Limache, y la razón por la que el
conquistador español se estableció en Limache fue porque le permitía el
control de los valles de Limache,
Quillota, la desembocadura del Aconcagua y los sectores auríferos de Quilpué y
marga marga, Casablanca y el portezuelo
de tiltil, donde tenía acceso directo a dirigirse a los puertos de Valparaíso y
quintero, por otro lado también por la fertilidad de Limache era comparable con
Quillota (Venegas, 2000, pp. 32).
En
comparación con la población de Quillota, Limache tuvo una población
considerablemente menor por lo cual no era necesario tener hombres establecidos
como en la ciudad de Santiago, pero tenemos que adentrarnos en otro punto
importante para comenzar hablar sobre las haciendas en Limache, y esta es las
doctrina de Limache, estas eran jurisdicciones donde un cura o doctrinero
tenía el deber de adoctrinar en la fe y
costumbres españolas a la población autóctona. En un principio solo había en la
zona la parroquia central de Quillota y desprendía de estas muchas vice
parroquias, luego ya aproximadamente 1630 surge divisiones en las doctrinas
transformándose en una Limache y desligándose de Quillota. Luego con la cedula
de 1975 se hizo las divisiones pertinentes con los curatos donde comparte curato
con Quillota donde el curato se llama Catapilco, donde el valle de Limache
tenía la parte norte de este (Venegas, 2000, pp. 36).
Por
último para centrarnos en las haciendas que es el tema central de esta
investigación, no es menos importante mencionar ¿cuantos habitantes tenía el
valle y de que vivían estos?
Para
responder la primera pregunta fue bastante complicado ya que el censo realizado
por los curatos en 1777 y en 1778 nos da entender que entre españoles, indios y
mestizos en la comarca habían aproximadamente 2500 personas, que en comparación
con Quillota era un 15% de lo que tenían ellos aunque no era muy confiable dada
a las precarias forma de censo (Demografía histórica, la población del obispado
Santiago 1777-1778, pp. 57-74).
Y
por último esta población vivió de múltiples actividades económicas dada por la
fertilidad del valle por lo cual en el mercado exterior (Perú) y el mercado
interno de chile tuvo mucho éxito, de los productos extraídos en Limache fueron
extracción de plata, oro y cobre la cual tenía que extraerse en invierno por la
falta de agua , otro producto fue el
cáñamo y los frutos de la palma los cocos fueron productos bastante exitoso y
ya en el siglo XVIII fue un gran exportador de trigo y cebada con un aproximado
de 60000 fanegas y uno de los centro de la producción bovina con una cantidad
de 15000 vacas. De esta forma la comarca de Limache siendo de pocas almas
vivían de buena manera gracias a la fertilidad de sus suelos (Relaciones
económicas del reino de chile de 1780, pp.38, en Venegas, 2000, pp. 45).
Las
haciendas y latifundios en Limache.
Gracias
a la información anterior podemos entrar de lleno al tema de este trabajo de
investigación y es acerca sobre las haciendas y latifundios del valle de
Limache que fueron uno de los verdaderos productores económicos de la zona
central y sur.
Es muy difícil hablar de todas las propiedades
ya que por la adquisición de los dueños compraban una tierra y las unían a
otras y esta se vendía y la adquirían otros y las juntaba con otras tierras,
etc., así que nos centraremos en los latifundios más importantes de Limache
siendo estos los más grandes y más prósperos en el valle, siendo estos las
haciendas de tabolango ,santa cruz de Limache, san pedro de Putumpur y la
unificación de estos el latifundio de
estos dos , son los más importantes en la historia económica y social de
la comarca de Limache.
Partiendo
por la estancia de la de Santa Cruz, en un principio era tres terrenos de
distintos dueños separados por los cordones de cerros que corresponden a los
que separan Limache de Quilpué y del rio Aconcagua, adquirido por Juan de
Maluenda ya en 1624 y unificando estos 3
predios, en esta hacienda se producía una gran cantidad de ovinos con un
aproximado de 2000 ovejas por año, en comparación con la hacienda de san pedro
la que producía más en el ámbito agrícola, la estancia de Limache que no
quedaba tan atrás en temas de producción, esta hacienda exportaba muchos
productos entre los cuales ya mencionamos, como minerales entre ellos cobre,
plata y oro, además una fuerte cantidad de ovinos por año, trigo para
exportarlo hacia el virreinato y suministrar a las tierras del sur, alguna
variedades de tubérculos y hortalizas.
Producto
a su extensión poseía muchos arrendatarios, entre ellos órdenes religiosas como
los mercedarios y el monasterio de Santa Clara, además de malos negocios, los
Maluenda empezaron a subdividir los territorios, en el que empezaron a pelear
por estos, como por ejemplo los mercedarios buscaban tener el núcleo de la
hacienda por tener más antigüedad dentro del territorio y por el cuarto, y
Ortiz de zarate que había adquirido la otra parte de la estancia buscaba
también el centro, pero la real audiencia a de 1752 decreto que si ninguno de
los propietarios llegaba un acuerdo la estancia seria rematada, en otras
palabras esta lucha por la estancia los mercedarios tenía 1/3 de la estancia y
Ortiz tenía 1/3 y luchaban por el centro de esta zona. Nunca se llegó a un
acuerdo y se remató las tierras anexándola a la estancia de san pedro de
Putumpur haciendo el latifundio más próspero de la comarca (Venegas, 2000, pp.
63).
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| Latifundio, Limache, 1881 |
Producto
de la muerte del ultimo Maluenda la hacienda cayó en desgracia y nunca se pudo
recuperar y por esta razón los Carvajal de la hacienda de san pedro de putumpur
tomo la iniciativa de tomarla, ocupa el cajón de san Pedro, sus límites eran
entres el monte la campana hasta la villa de san Martin, en cuanto a los dueños
los Carvajal tuvieron mejor suerte al administrar sus territorios, ya que sus
tierras eran las más prosperas de toda la comarca, y me atrevo a decir las más
fértiles del valle central, por lo cual exportaba el doble de fanegas de trigo
que la hacienda santa cruz y poseía más ganado vacuno que las demás haciendas,
en el tema agrícola producía los mismos productos pero se estima que el doble o
hasta el triple que las demás hacienda. Putumpur hacia la mitad del siglo XVIII
se empezó a desarrollar el inquilinaje a través del arrendamiento de tierras a
mestizos y españoles pobres, una práctica que conocemos en el latifundio
tradicional y efectuado en todo el país en el siglo XVIII. Además, podemos ver
que la familia Carvajal eran vecinos de la nueva villa de Quillota poseían
medio solar en la zona, lo que podemos apreciar que las políticas de fundación
de villas y obligación de establecerse allí se hace muy presente la obligación
que tenía los vecinos, solo como dato anecdótico.
Los
Jesuitas.
Pero
surgió una crisis económica entre 1730 a 1740 que dejo a los terratenientes
endeudados y sin la capacidad de seguir manejando sus estancias así que
apareció el elemento jesuita que compro estas haciendas y las unifico
transformando las haciendas de san Pedro y Limache en el latifundio más grande prospero de la zona central, los jesuitas ya
era sabidos que eran buenos comerciantes y prestamistas y por su gran cantidad
de dinero que posean fueron los pocos en mantenerse de pie en frente de estas
crisis que afectaron a los terratenientes del valle.
Los
jesuitas le dieron a su propiedad por lo menos 3 funciones importantes, una de
ellas es de ser proveedores de leña y se puede saber por documentos en los
cuales se exporta leña a zonas aledañas, los jesuitas tenían otra función la
cual era arrendar tierras en las zonas del curso bajo del estero de Limache o
bien cercanos a la iglesia de la santa
cruz, por último la tercer y más importante de las tareas que poseía esta hacienda
era la expansión ganadera, donde tenía una distancia de 2 leguas de las
casas poseían cerca del rodeo un lugar
llamada la quesería donde se faenaban los animales y cada arrendatario poseía
su propia camada de animales la cual contribuía al aumento de estos mismos en
pos del beneficio de la propia hacienda.
La
fuerza de trabajo en el latifundio habían tantas tareas especializadas, trabajo
era imprescindible (Venegas, 2000, pp. 74), donde por lo menos tuvo 36 esclavos
negros en los cuales tenían que trabajar en la agricultura y en las faenas más
pesadas del campo, y por otro lado están los peones fue la otra fuerza laboral,
los cuales tuvieron el arduo trabajo del ganado y en la cosecha de algunos
frutos y las cosechas agrarias de la propiedad, se deduce que la cantidad de
trabajadores entre peones e inquilinos sumaba entre 160 y 170 hombre, no se
tiene una cifra exacta por pocas fuentes existentes, pero se calcula esta
cantidad producto de los peones que recibía los anteriores dueños de las
respectivas propiedades. En los periodos más fuetes y de grandes trabajos como
el rodeo, la siembra, cosechas entre fines de octubre y febrero que traían un
amplio movimiento comercial hacia el exterior como Valparaíso, Santiago
aumentaba a casi unos 200 trabajadores por lo que el latifundio y sus dueños
vivían en una bonanza económica y se puede ver en los sueldos de los
trabajadores.
 |
| Compañía de Jesús. |
Los
productos que más se exportaba en este latifundio eran la diversidad ganadera,
vid, frutas, cultivo cereal ero, trabajo de cuero, molinería, pan queso y
cecinas, donde se vendía a Santiago, Quillota y Valparaíso (Venegas, 2000, pp.
78), además se tiene registro de que exportan más de 800 kilos de cobre al año
directo a Santiago.
Pero
toda esta bonanza acabo cunado por órdenes directas de España expulsaban a los
jesuitas como el 11 de agosto de 1767 el gobernador Antonia Guill de Gonzaga
que enviaba al corregidor de Quillota en el cual explicaba que su majestad con
la real cedula de 10 marzo 1767, le ordenase que cumpliese puntualmente
dirigidas al extrañamiento de la religión de la compañía fe Jesús de todos sus
dominios (Carta de Antonio Guill al corregidor de Quillota, Venegas, 2000, pp.
82).
Pero
con la expulsión de los jesuitas las
actividades hacienda san pedro y de Limache sufrieron importantes trastornos
al momento de la partida de los hijos de san Ignacio, pero no menciona una
crisis sino que una inestabilidad, aunque se afirma que los jesuitas rompieron
con pesadas estructuras económicas y sociales e impusieron otras nuevas, no
menos complejas que los anteriores pero si más dinámicas. Su riqueza
afortunadamente estaba invertida en sus bienes, no yacía guardada en un rincón
secreto. El fruto de su esfuerzo lo recogieron otros. (Venegas, 2000, pp. 85).
Para
cerrar la temática.
El
territorio de Limache ha sido ocupado e influenciado, en general, por tres
culturas diferentes que son los Picunche, los incas y los españoles, estos
últimos incentivaron a proyectos de urbanización deplorables durante los siglos
XVII y XVIII. En cambio Limache tuvo una concentración de población en base a
los latifundios y comarcas, aunque menor que su vecina Quillota, ahora sí pudo
desligarse de esta de manera jurisdiccional creándose la doctrina de Limache.
Económicamente fue uno de los valles más prósperos y productores, dado a las
múltiple actividades económicas, la fertilidad del valle y el existo de los
mercados del Perú e internos de chile, en la extracción de minerales, como el
cobre, oro y plata, y la producción agrícola, como el trigo, y ganadera. Hay
que destacar que las haciendas de tabolango, santa cruz de Limache, san pedro
de Putumpur, entre otras, incidieron en la conformación de la ciudad, así como
la rivalidades por los terrenos y la compra por parte de los comarcas
permitieron florecer económicamente sus hacendados, pero algunos cayeron por
malos negocios, otros fueron divididos, rematados o comprados. En la
administración del territorio no solo afecto la actividad económica y la
adquisición de tierra a los terratenientes, sino también el impacto religioso
en la delimitación de sus jurisdicciones, más aun en la crisis económica del
siglo XVIII, la compra de hacienda por parte de los jesuitas, dio paso a una
unificación de las haciendas, de modo que, se creara un latifundio más
grande prospero de la zona central, por
una buena administración comercial, no obstante su expulsión trajo
inestabilidad, pero no crisis por las nuevas dinámicas sociales y económicas
que impusieron.
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http://itadaniskar-lacoloniaenchile.blogspot.cl/2010/06/la-hacienda.html
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